Por fin llega a la pantalla grande el tan esperado remake de la cinta que se hizo famosa en 1987. Joel Kinnaman (a quien yo conozco en su papel del Detective Holder en "The Killing") interpreta a Alex Murphy; un policía dedicado que es víctima de un intento de homicidio al tratar de hacer justicia por el ataque de su compañero. Murphy se vuelve el candidato perfecto para Raymond Sellars, (Michael Keaton), presidente de la compañia OmniCorp que pretende modificar las leyes en Estados Unidos para permitir el uso de robots en seguridad pública. Desgraciadamente Murphy no es exactamente el candidato ideal ya que sus emociones y su sentido del deber interfieren con la parte robótica que ha sido incorporada. Pese a que la película pretende sólo entretener a mí me hizo refleccionar acerca de la fina línea que existe entre los avances científicos y la humanidad. Sin duda cada día toda esta tecnología que pretende hacernos la vida más fácil y segura también nos ha quitado contacto humano que buena falta nos hace. Creo que Kinnaman hace un buen papel como un Murphy y si vieron la primera peli podrán apreciar ciertas menciones a la cinta original en ésta. Yo como no la vi no entendí pero mi esposo tuvo a bien explicarme. Pese a todo lo anterior creo que la movie prometía más de lo que nos dio y por eso le doy "estaban buenas las palomitas".
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